7.10.14

Menos Estado y Derechos

Germán Alarco

(Diario Uno, 3/10/2014, p.13)

La Asociación de Exportadores (ADEX) pretende establecer un nuevo régimen laboral y de impuestos, según ellos orientado a sacar de la informalidad a 11 millones de personas. El nuevo régimen laboral general profundizaría el que ya se aplica al sector agrario, desean reducir progresivamente el IGV hasta una tasa del 10% y establecer deducciones al impuesto a la renta si se crean puestos de trabajo permanente, entre otras. Estas medidas van un paso más allá de las formuladas por la Cámara de Comercio de Lima (CCL) que planteó la derogatoria del impuesto temporal a los activos netos, mayores deducciones en el impuesto a la renta, reducir los costos laborales y bajar el IGV de 19% a 18%, entre otras, en perfecta alineación con los anuncios del gobierno.

ADEX se olvida que los mayores niveles de contratación de trabajadores en el sector agrario son resultado del alto dinamismo sectorial observado en las exportaciones agropecuarias. Establecer que el régimen de contratación es el principal factor explicativo de su demanda es ignorar que en la determinación para cualquier producto o servicio intervienen el nivel de ingreso o producción y el precio del factor. Sin embargo, más allá de esta discusión los exportadores pretenden profundizar el régimen laboral agrario estableciendo vacaciones anuales de sólo 7 días durante los primeros 5 años respecto de los 15 días señalados actualmente y 30 días del régimen ordinario. Mienten al señalar que este es el estándar latinoamericano, cuando ello sólo ocurre en México por el primer año de trabajo. En este país se agregan dos días adicionales de vacaciones por cada año laborado durante los cuatro siguientes y luego 2 por cada cinco transcurridos (Ley Federal del Trabajo, artículo 76).

La vulneración de los derechos laborales sería mayor si recordamos que el régimen agrario (Ley 27360) señala que la jornada de trabajo puede ser acumulativa y no de 8 horas diarias o 48 horas semanales con 12 horas extras máximas a la semana. Asimismo, la indemnización por despido arbitrario está a la mitad del régimen laboral común (máximo de 6 sueldos respecto de 12). Hay menores pagos por sobretiempos y la remuneración diaria incluye las CTS y las gratificaciones de Fiestas Patrias y Navidad, entre otras limitaciones.

La otra perla de ADEX y la CCL es que mientras presionan por más drawback, dicen que para restituir impuestos del 5% al 8%, quieren reducir la recaudación de tributos directos e indirectos que a la larga afectaría negativamente la capacidad de gasto del gobierno. En fin, todas estas son fórmulas perfectas para contribuir a reducir la inversión privada por menor tamaño del mercado interno y de la capacidad del Estado para hacer frente a las necesidades de la Sociedad.

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