Diario UNO, 27/7/2018, p. 10.
Colombia, a finales del mes de mayo, ingresó como miembro 37 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Es la tercera economía de América Latina en hacerlo después de Chile y México. Perú sigue en la lista de espera. La OCDE tiene como misión promover políticas que mejoren el bienestar económico y social de las personas alrededor del mundo ofreciendo un foro donde los gobiernos pueden trabajar conjuntamente para compartir experiencias y buscar soluciones a los problemas comunes. Un tema importante donde la OCDE puede ser útil al Perú es el relativo al fortalecimiento de las finanzas públicas para atender las brechas de infraestructura y sociales. En 2017 la presión tributaria peruana fue equivalente al 15% del PBI.
La OCDE publica periódicamente un informe armonizado sobre la recaudación de impuestos de los países miembros y de América Latina y el Caribe. Los últimos informes corresponden a los años 2017 y 2018 respectivamente con información hasta 2016. Hay muchas sorpresas. El Perú muestra en 2016 una presión tributaria (total de ingresos tributarios/PBI) del 16.1% sólo superior a la de Venezuela, República Dominicana y Guatemala. La lista es encabezada por Cuba, Barbados, Brasil, Argentina y Belice con niveles entre 41.7% y 29.6% del PBI. El promedio regional fue 22.7%. Los socios de la Alianza del Pacífico muestran presiones tributarias superiores a la peruana: Chile 20.4%, Colombia, 19.8% y México 17.2% del PBI.
La diferencia entre el Perú y América Latina respecto al promedio de los miembros de la OCDE es grande, ya que este fue 34.3% del PBI en 2016. Los gobiernos liberales de Alemania, Reino Unido y España tuvieron presiones tributarias del 37.6%, 33.2% y 33.5% respectivamente. Los niveles superiores al 40% se observan en Austria, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Italia y Suecia. Los EE.UU., Canadá y Corea del Sur tienen niveles de 26%, 31.7% y 26.3% respectivamente.
La recaudación por contribuciones a la seguridad social, impuestos sobre los bienes y servicios (aranceles e ISC especialmente) y otros impuestos del Perú están claramente por debajo de los promedios regionales. Por otra parte, la recaudación por el IGV e impuestos a la renta a personas y empresas están por encima de los promedios regionales. Asimismo, donde estamos totalmente rezagados es en la recaudación de impuestos a nivel regional y local donde es prácticamente inexistente frente a Brasil, Argentina y Colombia donde fue equivalente al 30.3%, 16.8% y 16.2% respectivamente de los ingresos totales del gobierno. Las diferencias del Perú respecto del promedio OCDE son notorias en los impuestos a la propiedad, contribuciones sociales, a la renta de las personas e ISC a combustibles. Hay muchos espacios de mejora.